viernes, 21 de mayo de 2010

Los Ocloyas del Bicentenario



San Salvador de Jujuy, 20 de mayo de 2010.-

Desde niños soñamos con una País inclusivo. Donde la cuestión ética y el reconocimiento preexistente de pueblos que habitaron nuestra tierra mucho antes de la conformación de los estados prime sobre las ambiciones personales, la discriminación y el egoísmo.
Muchas cuestiones de reconocimiento que involucra a las comunidades originarias de nuestro País se hicieron visibles hace poco menos de una década; luego de permanecer ocultos, reprimidos e ignorados desde tiempos de la conquista en toda Latinoamérica.
El Bicentenario nos encuentra heridos pero no derrotados y sentimos, hoy más que nunca, que encontramos el camino de lucha en el que nuestros antecesores dejaron sus huellas. Porque ya no somos los tristes destinatarios de políticas dirigidas desde arriba sino el motor que genera el cambio en las comunidades.
Nuestra participación, desde Promotores Territoriales, en pos de éste Proyecto Nacional no solo nos incluye sino que nos hace parte constructora de un cambio responsable para un futuro mejor. Esto teniendo en cuenta lo que venimos trabajando en las diferentes comunidades de la Provincia de Jujuy. El rol de las organizaciones sociales y de las comunidades originarias a través de sus representantes en éste sentido es más que elemental para revertir una postura también de hace más de 200 años de los monopolios económicos que venden lo que no puede ser comercializable - por una cuestión ética, - la dignidad de nuestros pueblos.
Hace poco tuve la oportunidad de saludar a nuestra Presidente, Cristina Fernández de Kirchner; - pensaba que importante sería poder transmitirle algo significativo y también pensaba en tantas cosas. Cuando se acercaba ella, estaba tan emocionada que lo único que puede decir es: “Señora Presidente no se olvide de los pueblos originarios… - ella me respondió - no me olvido, no me olvido”.
Hoy, con tantos hermanos que nos representan de todos los puntos de nuestra querida Patria en la Marcha, este pequeño grupo de Ocloyas, que todavía sobrevive en las Yungas Jujeñas, con la esperanza de un futuro digno, les piden a nuestros representantes: “no se olviden de los pueblos originarios de Argentina”.

Por Pastora Mamaní, El Refugio de los Ocloyas
Facilitadora por Jujuy.
Dirección de Promotores Territoriales
Ministerio de Desarrollo Social de la Nación

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